Nigella sativa (N. Sativa) es una pequeña planta con flores que crece en el suroeste de Asia, Oriente Medio, el sur de Europa y el norte de África.

Este arbusto también produce frutos con diminutas semillas negras. Comúnmente conocida como semilla negra, las semillas de N. sativa tienen muchos otros nombres, incluyendo comino negro, alcaravea negra, nigella, flor de hinojo y cilantro romano.

Este aceite se extrae de las semillas de N. sativa y se ha utilizado en la medicina tradicional durante más de 2,000 años debido a sus muchos beneficios terapéuticos.

Los estudios sugieren que puede tener numerosas aplicaciones para la salud, incluyendo el tratamiento del asma, y ayudar a la pérdida de peso. También se aplica tópicamente para tratar la piel y el cabello.

Este artículo describe los beneficios potenciales para la salud que tiene el aceite de semilla negra, así como los posibles efectos secundarios y su dosificación.

En la medicina tradicional, el aceite de semilla negra se ha utilizado para tratar una variedad de afecciones. Como resultado, a veces se le ha llamado una “panacea” o sanador universal.

Aunque no todos sus usos medicinales han demostrado ser eficaces, el aceite de semilla negra y sus compuestos vegetales se han relacionado con varios beneficios para la salud.

Rico en antioxidantes

El aceite de semilla negra es rico en antioxidantes, compuestos vegetales que ayudan a proteger las células contra el daño causado por moléculas inestables llamadas radicales libres.

Los antioxidantes son importantes para la salud, ya que la investigación ha demostrado que pueden reducir la inflamación y proteger contra afecciones como enfermedades cardíacas, enfermedad de Alzheimer y cáncer.

En particular, el aceite de semilla negra es rico en timoquinona, la cual tiene potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Como resultado, los estudios sugieren que este compuesto puede proteger la salud cerebral y ayudar en el tratamiento de varios tipos de cáncer.

Puede ayudar en el tratamiento del asma

El asma es una afección crónica en la que el revestimiento de las vías respiratorias se hincha y los músculos que las rodean se contraen, lo que dificulta la respiración.

La investigación ha demostrado que el aceite de semilla negra, y específicamente la timoquinona en el aceite, puede ayudar en el tratamiento del asma mediante la reducción de la inflamación y la relajación de los músculos en las vías respiratorias.

Un estudio en 80 adultos con asma encontró que tomar 500 mg de cápsulas de aceite de semilla negra dos veces al día durante 4 semanas mejoraba significativamente el control del asma.

Pero se necesitan estudios más largos y de mayor escala para evaluar la seguridad a largo plazo y la eficacia de los suplementos de aceite de semilla negra en el tratamiento del asma.

Puede ayudar a bajar de peso

Si bien el mecanismo exacto no se ha comprendido por completo, la investigación muestra que el aceite de semilla negra puede ayudar a reducir el índice de masa corporal (IMC) en personas con obesidad, síndrome metabólico o diabetes tipo 2.

En un estudio de 8 semanas, 90 mujeres de 25 a 50 años con obesidad recibieron una dieta baja en calorías y un placebo o 1 gramo de aceite de semilla negra por comida por un total de 3 gramos por día.

Al final del estudio, aquellas que tomaron aceite de semilla negra habían bajado significativamente más peso y circunferencia de la cintura que el grupo placebo. El grupo del aceite también experimentó mejoras significativas en los niveles de sus triglicéridos y del colesterol LDL (malo).

A pesar de estos resultados prometedores, se necesita más investigación sobre la seguridad a largo plazo y la eficacia de tomar aceite de semilla negra para bajar de peso.

Puede reducir los niveles de azúcar en la sangre

Para las personas con diabetes, se ha demostrado que los niveles de azúcar en la sangre consistentemente altos aumentan el riesgo de complicaciones futuras, como enfermedad renal, enfermedad ocular y accidente cerebrovascular.

Varios estudios en individuos con diabetes tipo 2 indican que una dosis de 2 gramos por día de semillas negras integrales, que hayan sido trituradas, puede reducir significativamente los niveles de azúcar en la sangre en ayunas y los niveles de hemoglobina A1c (HbA1c), una medida de los niveles promedio de azúcar en la sangre durante 2 a 3 meses.

Mientras que la mayoría de los estudios utilizan polvo de semilla negra en cápsulas, el aceite de semilla negra también se ha demostrado que ayuda a reducir los niveles de azúcar en la sangre.

Un estudio en 99 adultos con diabetes tipo 2 encontró que tanto 1/3 de una cucharadita (1.5 mL) como 3/5 de una cucharadita (3 mL) por día de aceite de semilla negra durante 20 días reducían significativamente los niveles de HbA1c, en comparación con un placebo.

Puede ayudar a reducir la presión arterial y los niveles de colesterol

El aceite de semilla negra también ha sido estudiado por su eficacia potencial en la reducción de la presión arterial y los niveles de colesterol.

La presión arterial alta y los niveles altos de colesterol total y LDL (malo) son factores de riesgo importantes para la enfermedad cardíaca.

Dos estudios, uno en 90 mujeres con obesidad y el otro en 72 adultos con diabetes tipo 2, encontraron que tomar de 2 a 3 gramos de cápsulas de aceite de semilla negra por día durante 8 a 12 semanas, reducía significativamente los niveles de LDL (malo) y colesterol total.

Otro estudio en 90 personas con niveles altos de colesterol observó que consumir 2 cucharaditas (10 gramos) de aceite de semilla negra después de desayunar durante 6 semanas reducía significativamente los niveles de colesterol LDL (malo).

El aceite también puede ayudar a bajar la presión arterial.

Un estudio en 70 adultos sanos observó que 1/2 cucharadita (2.5 mL) de aceite de semilla negra dos veces al día durante 8 semanas reducía significativamente los niveles de presión arterial, en comparación con un placebo.

Aunque prometedora, la investigación en general sobre el aceite de semilla negra en la reducción de la presión arterial y los niveles de colesterol es limitada. Se necesita más investigación para confirmar la dosis óptima.

Puede proteger la salud cerebral

La neuroinflamación es la inflamación del tejido cerebral. Se cree que juega un papel importante en el desarrollo de enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson.

Las primeras investigaciones en animales y en tubos de ensayo (in vitro) sugieren que la timoquinona en el aceite de semilla negra puede reducir la neuroinflamación. Por lo tanto, puede ayudar a proteger contra trastornos cerebrales como la enfermedad de Alzheimer o Parkinson.

Sin embargo, actualmente hay muy poca investigación sobre la eficacia del aceite de semilla negra en los seres humanos, específicamente con respecto al cerebro.

Un estudio en 40 adultos mayores sanos encontró mejoras significativas en las medidas en la memoria, atención y la cognición después de tomar 500 mg de cápsulas de N. sativa dos veces al día durante 9 semanas.

Aun así, se necesita más investigación para confirmar los efectos protectores del aceite de semilla negra para la salud del cerebro.

Puede ser bueno para la piel y el cabello

Además de los usos médicos, el aceite de semilla negra se usa comúnmente de forma tópica para ayudar con una variedad de afecciones de la piel e hidratar el cabello.

La investigación sugiere que, debido a sus efectos antimicrobianos y antiinflamatorios, el aceite de semilla negra puede ayudar en el tratamiento de algunas afecciones de la piel, incluyendo:

A pesar de las afirmaciones de que el aceite también puede ayudar a hidratar el cabello y reducir la caspa, ningún estudio clínico apoya estas afirmaciones.

Otros beneficios potenciales

El aceite de semilla negra puede tener otros beneficios para la salud, incluyendo:

  • Efectos anticancerígenos. Los estudios de tubo de ensayo han demostrado que la timoquinona en el aceite de semilla negra ayuda a controlar el crecimiento y la diseminación de varios tipos de células cancerígenas.
  • Reducir los síntomas de la artritis reumatoide. Debido a sus efectos antiinflamatorios, la investigación sugiere que el aceite de semilla negra puede ayudar a reducir la inflamación de las articulaciones en las personas con artritis reumatoide.
  • Infertilidad masculina. La investigación sugiere que el aceite de semilla negra puede mejorar la calidad del semen en hombres diagnosticados con infertilidad.
  • Antifúngico. También se ha demostrado que el aceite de semilla negra tiene actividades antimicóticas. En particular, puede proteger contra la Candida albicans, que es una levadura que puede conducir a la candidiasis.

Mientras que las primeras investigaciones sobre las aplicaciones de aceite de semilla negra se muestran prometedoras, se necesitan más estudios en seres humanos para confirmar estos efectos y las dosis óptimas.

RESUMEN

El aceite de semilla negra es alto en antioxidantes y puede tener varios beneficios para la salud. Estos incluyen el tratamiento del asma y diversas afecciones de la piel, la reducción de los niveles de azúcar en la sangre y colesterol, ayudando en la pérdida de peso, y la protección de la salud cerebral.

Cuando se usa en pequeñas cantidades para cocinar, el aceite de semilla negra es probablemente seguro para la mayoría de las personas.

Sin embargo, hay pocas investigaciones sobre la seguridad a largo plazo de consumir dosis más grandes con fines terapéuticos.

En general, el uso a corto plazo de 3 meses o menos no se ha relacionado con efectos secundarios graves. Sin embargo, en un estudio, tomar 1 cucharadita (5 mL) de aceite de semilla negra por día durante 8 semanas causó náuseas e hinchazón en algunos participantes.

Una posible preocupación es que el aceite de semilla negra puede interactuar con medicamentos que se procesan a través de la vía del citocromo P450. Los medicamentos comunes que podrían verse afectados incluyen warfarina (Coumadin) y betabloqueantes como el metoprolol (Lopresor).

También existe la preocupación de que tomar demasiado aceite de semilla negra podría dañar los riñones. En un caso reportado, una mujer con diabetes tipo 2 fue hospitalizada por insuficiencia renal aguda después de tomar de 2 a 2.5 gramos de cápsulas de semillas negras a diario durante 6 días.

Sin embargo, otros estudios no han mostrado efectos negativos en la salud renal. De hecho, algunos estudios incluso han sugerido que el aceite de semilla negra tiene un efecto protector sobre la función renal.

Si actualmente tienes algún problema renal, se recomienda que hables con tu proveedor médico antes de tomar aceite de semilla negra.

Finalmente, debido a la poca investigación, las mujeres que están embarazadas o amamantando deben evitar el uso de aceite de semilla negra, excepto en pequeñas cantidades como saborizante para los alimentos.

En general, se necesita más investigación sobre la seguridad del aceite de semilla negra en los seres humanos, especialmente para su uso a largo plazo.

RESUMEN

El uso culinario del aceite de semilla negra es probablemente seguro para la mayoría de las personas. Debido a la falta de investigación, se desconoce la seguridad a largo plazo del uso de dosis más grandes de aceite de semilla negra con fines medicinales.

Como suplemento, el aceite de semilla negra se puede ingerir en forma de píldora o líquido. El aceite también se puede utilizar tópicamente en la piel y el cabello.

Si compras la forma líquida del aceite de semilla negra, se recomienda que elijas un producto de alta calidad que no tenga ningún ingrediente agregado.

Además, dado que la Dirección de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) no prueba la seguridad y eficacia de los suplementos, es importante elegir una marca de renombre.

Puede ayudar buscar productos que hayan sido certificados por ConsumerLabs, por la Convención de Farmacopea de Estados Unidos o por NSF International, todos estos prueban la calidad.

El aceite de semilla negra tiene un sabor fuerte que es ligeramente amargo y picante. A menudo, se compara con el comino o el orégano. Como resultado, si consumes aceite de semilla negra como líquido, es posible que desees mezclarlo con otro ingrediente con un sabor fuerte, como miel o jugo de limón.

Para usos tópicos, el aceite de semilla negra se puede masajear sobre la piel.

RESUMEN

El aceite de semilla negra se puede consumir en cápsulas o en forma líquida. Sin embargo, debido a su fuerte sabor, es posible que desees mezclar el aceite con miel o jugo de limón antes de ingerirlo.

Si bien el aceite de semilla negra puede tener algunos beneficios para la salud, no sustituye los medicamentos que ya puedas estar tomando.

Además, actualmente no hay pruebas suficientes para establecer una dosis recomendada. Como resultado, es importante hablar con tu proveedor médico antes de usar aceite de semilla negra.

Dependiendo del uso deseado, las cantidades de aceite de semilla negra que se han estudiado varían considerablemente.

Por ejemplo, en personas con asma, se encontró que tomar 1 mg de cápsulas de aceite de semilla negra diariamente durante 4 meses era seguro y efectivo como tratamiento complementario.

Por otro lado, en la pérdida de peso y la reducción de los niveles de azúcar en sangre, los estudios han demostrado que las dosis más altas de 2 a 3 gramos de aceite de semilla negra por día durante 8 a 12 semanas son las más efectivas.

Como la dosis puede variar según el uso, te recomendamos hablar primero con tu proveedor médico para que te recomiende una dosis personalizada.

RESUMEN

Debido a la investigación insuficiente, actualmente no hay una dosis recomendada establecida de aceite de semilla negra. Es importante que hables con tu proveedor médico para obtener recomendaciones de dosificación personalizadas.

El aceite de semilla negra es un suplemento común utilizado en la medicina alternativa para ayudar a tratar una variedad de afecciones.

La investigación actual sugiere que el aceite de semilla negra puede ser eficaz en el tratamiento del asma, ayudar a perder peso, y a reducir los niveles de azúcar y colesterol en sangre.

Además, los efectos antiinflamatorios y antioxidantes de la timoquinona en el aceite de semilla negra pueden ser protectores de la salud cerebral y retardar el crecimiento de las células cancerosas.

Aun así, se necesita más investigación para determinar la seguridad y la eficacia a largo plazo del aceite de semilla negra.

Antes de probar usar el aceite de semilla negra, asegúrate de hacer una cita con tu proveedor médico para determinar si puedes tomar este aceite y en qué cantidad.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español por Suan Pineda el 27 de septiembre de 2021.

Versión original escrita el 8 de mayo de 2020.

Última revisión médica realizada el 8 de mayo de 2020.